Carlos Daniel Ayala
Unión Nacional de Instaladores Hidrosanitarios, A.C.
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APLOMEX es una asociación civil que tiene un año de constitución y que surgió de la inquietud de muchos plomeros de toda la república por profesionalizar y certificar el oficio. Sin embargo, a pesar de su reciente constitución, es resultado de un trabajo de muchos años de plomeros que se reúnen para compartir sus experiencias y para apoyarse en sus proyectos. Una persona fundamental para el establecimiento de APLOMEX fue Mario Díaz, un plomero mexicano que tuvo la oportunidad de certificarse en Estados Unidos. Mario Díaz se da cuenta que en México la industria de la plomería no se considera un oficio profesional y que por tanto existen muchas oportunidades para desarrollarla.
Fortalecer las actividades de los plomeros con educación y promoviendo las buenas prácticas del oficio es el objetivo de APLOMEX, la Unión Nacional de Instaladores Hidrosanitarios.
Platicamos con Carlos Daniel Ayala, presidente de APLOMEX, y nos comparte que uno de los principales obstáculos para profesionalizar el oficio es cultural, ya que en México la plomería se considera un trabajo más, sin especialización. Carlos se ha dado cuenta de que existen muchas oportunidades desarrollar la cultura del agua, de la ecología y de la salud. Estos 3 aspectos -comenta Carlos-, son presentes en sociedades culturalmente desarrolladas. Este tipo de desarrollo social requiere plomeros profesionales que sepan manejar correctamente un recurso tan importante como es el agua, el tratamiento de los drenajes, el tratamiento también sustentable de los desechos y el abastecimiento de agua. En otros países ser plomero, es considerado un oficio esencial.
La plomería es un oficio que en la pandemia no paró, y de hecho en muchas partes del mundo los plomeros recibieron premios y reconocimientos, porque hacían funcionar a las comunidades. Puesto que todo mundo estaba en su casa, todo el mundo tenía desechos, problemas, y los plomeros tenían que estar ahí, trabajando, resolviendo. Particularmente en México, el contexto de la pandemia fue un parteaguas para identificar que se requiere fortalecer la formación del plomero, tanto en la técnica como en la cultura de trabajo para que el plomero sea considerado un oficio esencial para el desarrollo.
Carlos comenta que es frecuente en las obras, en donde se requieren plomeros profesionales que se contrata a personal sin capacitación en el oficio, quienes hacen el trabajo, pero no de manera profesional. El pensamiento prevalente es que si se contrata a alguien profesional es más caro. No contratar a personal capacitado, profesional por abaratar costos es un tema cultural. En México hay muchos plomeros, y existe un desequilibrio, porque cualquiera dice que se dedica a la plomería, hace mal el trabajo, y el plomero que vive de eso, que trata de ser profesional, queda su trabajo demeritado y la percepción social devaluada. Entonces, el objetivo de la formación profesional es por el bien del propio negocio del plomero, del propio sustento, por tanto, es necesario que en México existan plomeros profesionales.
APLOMEX tiene un local en Monterrey, que será el primer centro de formación para plomeros que existe en México. Nos menciona Carlos que en este centro de formación ya existe un grupo de compañeros preparándose. Ya están en proceso de preparación para tener la capacidad de brindar cursos, esto significa que se impartirá un esquema de enseñanza totalmente nuevo de la plomería. En México sí existen varios centros de formación para el trabajo, los cursos técnicos de plomería, pero APLOMEX quiere darle un enfoque totalmente nuevo, un enfoque basado desde la propia técnica hasta la profesionalización en el aspecto administrativo, y en el aspecto ecológico.
APLOMEX trabaja todos los días para el centro de formación en Monterrey sea el primero de muchos en la República, quieren que la educación de la plomería sea accesible para todos los interesados en plomería del país. Carlos comparte que quieren ser capaces de tener presencia en las principales ciudades del país: Monterrey, Guadalajara y Ciudad de México. Buscan tener esta presencia para crear un cambio cultural en cuanto a que los plomeros sean profesionales certificados.
En APLOMEX, la Asociación Civil, las decisiones, los recursos y las cuestiones ideológicas del proyecto se revisan con la mesa directiva. Sin embargo, el trabajo técnico se realiza con todos los miembros del país. Los compañeros de Tijuana, Monterrey, Tamaulipas, Quintana Roo, estamos comunicados y se apoyan para que en caso de que alguien tenga acceso a mayor conocimiento en un tema, como puede ser alguien de Guadalajara, comparta ese conocimiento con alguien que lo requiera y se encuentre en lugares menos desarrollados como el sureste, Tabasco, Chiapas.
Carlos resalta que la comunicación que se mantiene en APLOMEX ha ayudado mucho a nivelar la desigualdad que existe en lo técnico. A esto, el contacto con las marcas y su arduo trabajo les permite tener capacitaciones.
En algún tiempo durante la pandemia se trabajó en precisamente empezar a dar cursos o pláticas de la plomería en México. Ahora, el desarrollo virtual presenta oportunidades de trabajo híbrido para que los compañeros tengan acceso a formación virtual y a evaluación presencial. En APLOMEX, independiente al trabajo con las marcas, su objetivo es la profesionalización de los plomeros.
Carlos comparte que él comenzó con la plomería ya que su papá, electricista de formación, realizó trabajos de plomería durante su trabajo en el mantenimiento residencial y comercial. Por esas épocas Carlos pidió apoyo a su papá para que lo llevara como ayudante para aprender y ahí comenzó su pasión por la plomería.
Nos comparte que la plomería es un trabajo sobre todo de servir, de ayudar a las personas, y que, ver que las personas están contentas, que están cómodas, que están bien por un trabajo, es invaluable, más allá de lo que se pueda cobrar. Ese es el aspecto gratificante de la plomería. Además de ser plomero Carlos estudió Ing. Mecánico Electricista, estos estudios le abrieron un mundo de posibilidades de ver que la plomería está muy relacionado con varios aspectos de la ingeniería.
Los cálculos son muy necesarios en la plomería., no precisamente cálculos muy avanzados, pero sí aquellas técnicas que ayudan a trabajar con mayor eficiencia. Aplicar el conocimiento técnico permite ahorrar tiempo, esfuerzo, y dinero. Esto es parte de ser un profesional, aplicar el conocimiento para optimizar el trabajo con calidad.
Carlos agrega que, para ser un plomero, es básico utilizar matemáticas. Aunque no se tiene mucho en cuenta, muchos compañeros del oficio que llevan años siendo plomeros, no toman en cuenta que saben muchas matemáticas y las aplican todos los días. Las matemáticas son una herramienta de trabajo, aplicarlas te ahorran dinero, esfuerzo, y te ahorra tiempo.
Las matemáticas aplicadas a la plomería son cálculos muy básicos, pero que si se tienen presente, ahorran un mucho trabajo. También, es importante saber cómo funcionan los fenómenos térmicos o los fenómenos hidráulicos, tener presente ese conocimiento ayuda a resolver un problema más rápido, y quizá ayuda a resolver una situación que a lo mejor otros plomeros no han podido solucionar. Los plomeros que tienen estos conocimientos tienen un impulso para ofrecer un mejor servicio y así, a mejorar tu calidad de vida y su ingreso.
En relación con la enseñanza de la plomería en México. En APLOMEX han identificado que los cursos de plomería actuales enseñan a instalar la tubería en una casa, a instalar un lavabo, pero no dicen cómo es que puede llegar mejor agua a esa llave de ese lavabo o por qué la taza del baño no descarga bien si no está tapada. Este tipo de conocimiento son cuestiones que sí se explican en otros países, y eso quieren lograr con APLOMEX en México: aplicar las mejores prácticas internacionales para la capacitación de los plomeros, aterrizar y compartir aquí estos conocimientos.
Carlos nos comparte un ejemplo de este tipo de conocimientos, que se puede representar con un fenómeno bastante interesante que a lo mejor muchos plomeros lo han visto pero que desconocen totalmente su nombre o por qué se da. Existe un problema en plomería que se llama Sifonaje: cuando entras a un baño y huele mal.
Pues está todo, está la coladera, todo está bien sellado y pasa que, al revisar las trampas, que son la parte de los muebles en donde se aloja el sello del agua que impide el paso del olor hacia dentro, están secas. Y ¿por qué pasa eso? Si yo le echo agua y de repente ya no tiene, le vuelo a echar agua, y nuevamente se va. Ese problema se llama precisamente Sifonaje. Y es que cuando una persona realiza una descarga grande, por ejemplo, de un sanitario, le baja a la taza, y el agua que viene del sanitario jala el agua de las trampas más pequeñas, como de la coladera de la regadera o de la coladera del lavabo, y esto genera una presión positiva contra una negativa.
La presión negativa jala el agua y deja seca la trampa. Al no tener agua en la trampa, todo el olor del drenaje se mete a tu espacio habitable. Este es un fenómeno bastante recurrente.
Carlos comenta que llegan a muchos servicios, muchos domicilios, en donde tienen su tapita de goma en la coladera. Tienen que estar comprando la tapita o taponear el lavabo, porque los plomeros que realizan esos servicios no han podido explicar ese fenómeno. Ya existen soluciones técnicas propias para esa clase de problemas.
Este es un problema de tantos. Carlos comparte que otro problema también bastante interesante, es que hay plomeros que instalan su bomba de agua demasiado lejos de la fuente donde se succiona el agua o la instalan demasiado alto. ¿Y qué pasa? Que tienen que estar, como se dice en Monterrey, achicando o purgando la bomba para que la bomba trabaje e impulse el agua hacia el depósito. Esto pasa porque no se tuvo en cuenta que cuando se hizo la instalación de la tubería de succión de la bomba, se sobrepasó la capacidad de succión de la bomba. Y pues esto tampoco se toma en cuenta, porque esto ya está especificado incluso en los datos técnicos del equipo, se llama succión neta positiva, que es la capacidad que tiene una bomba de aspirar agua para poderla impulsar. Si tú sobrepasas esa distancia, que normalmente se da alrededor de los 7 metros en promedio, entonces la bomba empieza a generar aire en la succión.
Estos son fenómenos que por lo general el plomero de calle, sin capacitación no entiende. Sin embargo, el conocimiento ahí está. Es accesible. Solo se necesita acercar de manera sencilla a los plomeros para que tengan acceso a esta información. Este conocimiento ahorra mucho trabajo, mucho tiempo de estarle pensando y ayuda a ganar dinero. El conocimiento a final de cuentas se debe traducir en dinero, es lo ideal. Por eso surge precisamente APLOMEX.
Además de la técnica aplicada a la plomería, también es muy importante la relación con los clientes. La base del buen servicio son dos cosas: primero es la educación y no la educación del conocimiento, sino la educación del trato con las personas. Tener empatía, saber escuchar, tener paciencia. A lo mejor puede haber un muy buen plomero capaz de resolver el problema más difícil de la plomería, pero es importante entender que uno trabaja con personas. Esto significa entender que el plomero debe de manejarse con respeto, con empatía. Conocer y ofrecer el trato de primera al cliente, saber en qué términos tratarlo, en qué términos estar cómodo, lograr que el cliente esté cómodo y el plomero. Es muy importante. Y la segunda base del buen servicio es la limpieza. La limpieza en este trabajo es primordial. Carlos comenta que muchas veces se encuentran con personas que van y les dicen: “oiga, pero me deja bien limpiecito porque el otro día vino un plomero y me dejó un desastre aquí. Mi baño me dejó un desastre, la cocina.”
Entonces, todo eso también tiene que ver con procesos ya de formación personal. El aspecto técnico muy importante, la limpieza, la pulcritud, los acabados, y hasta un poquito el arte. Carlos afirma que cuando un plomero se esmera en su trabajo, cuando se busca la forma de dar ese poquito más, el cliente lo va a reconocer. Un buen cliente va a reconocer todos esos aspectos. Entonces está el bloque técnico, y también está el bloque personal. Ambas situaciones deben estar conciliadas. Eso forma parte del profesionalismo que debe de transmitir un plomero.
Carlos hace una mención importante relacionada con la legalidad del oficio. Comparte que lo general en el trabajo de plomería no se tratan aspectos de garantías, de contratos, que por el propio desconocimiento no existen. En este sentido, en APLOMEX les parece muy importante reconocer que se debe de empezar a fomentar el aspecto de la legalidad en el servicio, que es emitir facturas, hacer recibos, escribir garantías, hacer los contratos, que a final de cuentas la relación comercial se cuide y se respete. Este comportamiento es muy normal en muchos países, en donde si no tienes un documento que avale que alguien es plomero, simplemente no se puede trabajar. Porque el inspector de la ciudad no va a aprobar el trabajo, porque quien realizó el trabajo tiene estudio de plomería. ¿Quién dice que tú eres plomero? Pues nadie. Entonces más allá de la técnica aplicada a la plomería, las cuestiones culturales y legales, son bastante importantes para desarrollar, en la plomería y en muchos otros oficios relacionados con la construcción.
Carlos agrega que también, la sociedad debe entender que el oficio de la plomería, antes que cualquier otra cosa, es salud. Un espacio no saludable es un espacio, por ejemplo, un baño que huele mal.
Un espacio no saludable es una casa que a lo mejor cuando llueve o cuando hay tormenta se devuelve el drenaje por las coladeras. Todo eso es origen de muchas enfermedades. Un espacio no saludable es una taza de baño que a lo mejor se le tiene que bajar a cubetazos porque no hay agua corriente en la línea, porque no hay alguien que lo resuelva, porque no hay alguien que aporte una solución para la instalación.
Es deber principal del plomero mantener la salud y la seguridad de las personas. Lo más importante son los usuarios de esas instalaciones que los plomeros trabajan. Los plomeros siempre tienen que hacer su trabajo pensando en las personas, en que se les va a dar confort, y sobre todo salud. Carlos cree muy importante desarrollar ese concepto, y que las personas, los usuarios y el mismo plomero sepan de la importancia de su trabajo para la salud.
Los servicios de plomería cuestan y eso es parte de dignificar el trabajo. ¿Pero qué sucede, por ejemplo, en zonas marginadas? Lugares que apenas tienen acceso a servicios de drenaje, de agua potable y que no tienen acceso a contratar plomeros.
Ante esta situación, Carlos ha observado que las instituciones profesionales de plomería, o como en este caso, las asociaciones, se dedican a educar a las comunidades en el acceso al agua y en la gestión de desechos. Lo que implica compartir conocimiento, por ejemplo, de ecotecnologías: captación de agua de lluvia, fabricación o construcción de depósitos, elaboración de cisternas. Información y técnicas que a lo mejor, las comunidades por su misma vulnerabilidad en el desarrollo económico o cultural no tienen acceso. Por tal motivo, es muy importante que organizaciones, como en este caso APLOMEX proporcione acceso a esas comunidades a una formación que les permita tener conocimiento para el desarrollo de capacidades; para que con sus recursos pueden solucionar problemas importantes como tener acceso a un baño con agua corriente, poder bañarse de la forma más cómoda y rápida posible, calentar el agua.
Esto se puede desarrollar con ecotecnologías, muchas de ellas aplican técnicas muy económicas, precisamente para eso, para que todas las comunidades con déficit de acceso a servicios básico de agua puedan tener un espacio sanitario adecuados y funcionales. Carlos puntualiza que existen proyectos aislados aquí en México de muchas organizaciones que lo han logrado, pero cree que sí se debería de estandarizar y replicar su uso en todas las asociaciones o todos los involucrados en la industria de la plomería. Dar acceso a la información a las personas de escasos recursos o que viven en comunidades apartadas.
Finalmente, le preguntamos a Carlos si tiene algún mensaje para las personas que están considerando ser plomeros. A lo cual respondió, que lo principal es que a la persona le tiene que gustar lo que hace. Debe de tener cariño por ese oficio. Este oficio no es para cualquiera que no se quiera comprometer con su trabajo y con su calidad. Es un trabajo duro, realmente duro. No cualquier persona se mete debajo de un baño, levanta una taza y ve un problema que hay ahí cuando una taza está obstruida o un drenaje obstruido, no cualquiera se mete a una fuga de agua en una zanja de un metro de hondo para poner una tubería. Para realizar todas estas actividades es muy importante amar lo que se hace.
Con el compromiso de diversificar a sus empresas asociadas y la búsqueda constante del crecimiento de la industria, la Asociación de Empresas Proveedoras Industriales de México (APIMEX) organiza la quinta edición de DIVEX, uno de los encuentros de negocios y exposición de insumos, procesos y servicios industriales más importantes del Bajío que se realizará los días 12 y 13 de julio en Sala B301 de Poliforum León.
En DIVEX se podrán encontrar expositores de proveeduría industrial para sectores como: aeroespacial, médico, seguridad industrial y señalética, higiene y cuidado personal, metalmecánico y automotriz.
Asimismo, se realizará el Encuentro de Negocios B2B, a través del cual, empresas proveedoras expositoras tendrán citas especializadas durante los dos días con reconocidas empresas compradoras como: Pirelli, Mazda Logi, TOPY, Kronos, TS Tech Américas, PHI Comercializadora Logística, Electronik, FAS, SPE Servicios Profesionales de Enfermería, Guantes PRO, Grupo Madiver, MIICA, Oshkosh Corporación, México Sourcing, Frankische Industrial Pipes, Tsubaki, CLELAC, Clúster de Electrodomésticos, TIMKEN, entre otras.
Con esto, se busca posicionar a México y a la región Bajío como líderes en la captación de oportunidades de relocalización de las cadenas de suministro donde grandes empresas podrán encontrar proveedores de insumos, procesos y servicios industriales.
Este evento, está enfocado a propietarios de empresas, directores de compras, ingenieros de cadena de suministro, directores, gerentes, incubadores de proyectos e instancias gubernamentales. Además, DIVEX tendrá un programa que incluye mesas de networking entre expositores y compradores, así como un programa de conferencias y paneles.
El registro para asistir a DIVEX es sin costo a través de la página DIVEX
Arturo Esquivel Moreno
Colegio Nacional de Recursos Humanos, A.C.
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55 2244 1735
informes@conarh.org.mx
Instagram: conarh_mx
ICSOE significa: Informativa de Contratos de Servicios u Obras Especializados. Mientras que SIROC es el Servicio Integral de Registro de Obras de Construcción.
Al dedicarse a la realización de construcciones; ampliaciones, modificaciones o remodelaciones, se deben de registrar las obras ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Esto de acuerdo con el artículo 15-A de la Ley del Seguro Social que nos menciona:
La contratación de servicios especializados o la ejecución de obras especializadas deberán cumplir con las condiciones y requisitos establecidos en la Ley Federal del Trabajo.
La persona física o moral que contrate la prestación de servicios o la ejecución de obras con otra persona física o moral que incumpla las obligaciones en materia de seguridad social, será responsable solidaria en relación con los trabajadores utilizados para ejecutar dichas contrataciones.
La persona física o moral que preste servicios especializados o ejecute obras especializadas deberá proporcionar cuatrimestralmente a más tardar el día 17 de los meses de enero, mayo y septiembre, la información de los contratos celebrados en el cuatrimestre de que se trate, conforme a lo siguiente:
I. De las partes en el contrato: nombre, denominación o razón social, Registro Federal de Contribuyentes, domicilio social o convencional en caso de ser distinto al fiscal, correo electrónico y teléfono de contacto.
II. De cada contrato: objeto, periodo de vigencia; relación de trabajadores u otros sujetos que prestarán los servicios especializados o ejecutarán las obras especializadas a favor del beneficiario, indicando su nombre, CURP, número de seguridad social y salario base de cotización, así como nombre y Registro Federal de Contribuyentes del beneficiario de los servicios por cada uno de los contratos.
III. Copia simple del registro emitido por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social para la prestación de servicios especializados o la ejecución de obras especializadas.
Para la verificación del cumplimiento de las obligaciones establecidas en la Ley Federal del Trabajo y en el presente ordenamiento, el IMSS y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), deberán celebrar convenios de colaboración, para el intercambio de información y la realización de acciones de verificación conjuntas, en su respectivo ámbito de competencia.
El IMSS informará a la STPS del incumplimiento a los requisitos indicados en el presente artículo para los efectos señalados en la propia Ley Federal del Trabajo.
Por otro lado, al dedicarse a la realización de construcciones; modificaciones, ampliaciones o remodelaciones de cualquier edificación, deben registrar las obras ante el IMSS (tipo, ubicación, fases, trabajos a realizar) a través del SIROC, dentro de los cinco días hábiles siguientes a la fecha de inicio de las labores (arts. 15, penúltimo párrafo, LSS; 4o., 5o. último párrafo, y 12, Reglamento del Seguro Social Obligatorio para los Trabajadores de la Construcción por Obra o Tiempo Determinado —ROTC—).
Como podemos concluir, son deberes con finalidades distintas, porque el ICSOE sirve para reportar al IMSS la información de los contratos celebrados en materia de subcontratación de servicios o de ejecución de obras especializadas; mientras que el SIROC es un aplicativo que permite a los patrones dedicados a la actividad de la construcción cumplir digitalmente con las obligaciones de dar los avisos inherentes a una construcción.
De 20 a 350 veces la UMA, esto es: de $2,074.80 a $36,309.00, por omitir notificar, hacerlo extemporáneamente, con datos falsos o incompletos al IMSS, cada una de las obras o fase de obra que efectúen (arts. 304-A, fracc. XXI y 304-B, fracc. IV, LSS y 12, ROTC).
Y, de 500 a 2,000 veces la UMA, es decir: de $51,870.00 a $207,480.00, por no presentar las informativas cuatrimestrales ante el Seguro Social (arts. 304-A, fracc. XXII y 304-B, fracc. V, LSS).